miércoles, 26 de septiembre de 2018

Diego Kimhote: CAPÍTULO 23.


Nota de Autor: Cuando encuentre una de mejor calidad, la reemplazo. Gracias (como siempre) a Ikaro Ghandiny por la ilustración de este personaje. 

Diego Kimhote: CAPÍTULO 23.

El salón estaba bañado en plata y cromo, de cincuenta metros de largo y veinticinco de ancho, las paredes tenían la forma de un santuario religioso, había barandas de vidrio a los lados y un recto camino con el piso reluciente, por donde los JEN podían ver sus propios reflejos uniformes; en él yacían cuadrados y rombos dibujados con símbolos negros y blancos. Al final había una inmensa y oscura escalera que luego se dividía en dos, formando una “O” y desembocaba en un trono dorado, el cual estaba acompañado por un monumento picudo del mismo material como si fuera una pirámide, y dos ventanas inmensas en cada lado. En aquella plataforma y sentado en el trono dorado yacía Hariet.  

Kay y Sony, vestidos con togas blancas y curados de toda herida, entraron por la única puerta del salón. Finalmente, los JEN y el Único se reencontraban.

- Se tardaron- vociferó Hariet con aquella voz siniestra que portaba cuando usaba la armadura medieval y oscura.

Kay y Sony no eran los mismos, miraban a Hariet con una imponente seriedad y los ceños fruncidos. Hariet se levantó y les dio la espalda para contemplar el trono donde estaba sentado.

- Ya no hay nada que ocultar, sabemos quién eres – vociferó Kay- …Diego Kimhote.

El tercer señor oscuro reaccionó sorprendido y se desprendió los botones que sujetaban el casco, luego lo tiró al suelo y el reluciente piso sonó como cristal quebrándose. Los JEN vislumbraron a un hombre con el cabello gris peinado hacia atrás, recientemente mojado. Él giró y a los JEN se le sacudieron los corazones.

Igual a como lo recordaban de las memorias que vieron en el Alto Mundo, pero había algo diferente esta vez y es que lo estaban contemplando en persona. A simple vista, parecía Dick Natal vestido con una fornida armadura medieval.

Diego era más grandote que su hermano, la mitad de su rostro estaba llena de quemaduras horrendas de primer y segundo grado; y parecía tener algunos años más que Pedro. Miró a los JEN con sus ojos grises y bajó por las escaleras.

- A través de los tiempos se manifestó, aguardando ser liberado de las cadenas y a pesar de la larga espera, su odio creció- dijo- Qué vil mentira. Yo no odio a nadie, no se confundan. Soy el único que se anima a hacer lo necesario para mejorar la sociedad.

- Eres un asesino, Diego- le dijo Sony con frialdad desde la lejanía.

- Ese no es mi nombre.

- Lo es, así te bautizó tu madre, te guste o no.

- Exploraron mi pasado, muy astuto. Hubieran invertido ese tiempo en forjar un arma poderosa para derrotarme.

- ¿Cuál es tu plan, “Hariet”? ¿En qué consiste eso que llamas “reconstrucción”? – le preguntó Kay.

- ¿Lo quieren saber? Bien. Aún hay tiempo- se quedó en la escalera negra y los examinó con cautela- El PRODIGIUM no es un arma ni una fuerza destructiva sin razón. En su momento, gracias al sacerdote Meddes, pude establecer un vínculo con él. Entendí su lenguaje y me explicó muchas cosas- Kay y Sony prestaron atención- Cuando Tritán quebrantó la ley y visitó la dimensión del dios Groba (o Ázu, según los Ryanos), conformó los tres medallones para MANIPULAR EL TIEMPO, LA VIDA Y EL ESPACIO; y constituyó el TORQUEM para dominar la energía y la materia oscura.

<< Con estos instrumentos dibujó las formas del universo y le atribuyó la propiedad de expansión que los científicos de la Tierra teorizaron. Sin embargo, de esta combinación de elementos surgió el PRODIGIUM, una entidad propia que sólo se alimenta de planetas. En su momento fue expulsada y aunque no lo crean, el PRODIGIUM le teme a la profecía, a los dos inútiles muchachos que supuestamente terminarán con la dualidad. Hicimos un pacto, el caos no pisaría este mundo hasta que ustedes estén muertos, de eso me encargo yo- los JEN tragaron saliva- Y así, me dotaría de los agentes del caos, los parásitos que purgarán la humanidad. Luego, el PRODIGIUM eliminará la Tierra. >>

- No tiene sentido. ¿Por qué matar a las personas si luego destruirás el mundo? – dijo Kay.

- Yo no soy una mala persona, Kay- le dijo Hariet, a Kay le disgustó que lo llamara por su nombre, le hacía recordar a Natal- Tampoco soy cruel. Purgaré a la población para que no tengan que vivir el fin del mundo, morirán sin dolor y fácilmente. Hay otro objetivo, eso es cierto… como sabrán, el medallón de plata intercambia vidas. Una vez los tres medallones sean míos y el PRODIGIUM se alimente, la Tierra morirá y volverá a construirse desde cero. Aceleraré este proceso con el medallón de oro, reviviré a los que se lo merezcan con el medallón de plata (y para eso necesito los cadáveres) y expandiré este mundo de paz a través del medallón de bronce.

Sony rió con ironía.

- Te admiro, lo planeaste todo minuciosamente.

- No todo es casualidad- continuó el Único- Antes de terminar con esto, quiero contarles todo, se lo merecen. Desafiaron pruebas, crecieron y se hicieron fuertes. Manipulé sus vidas a mi antojo y por un bien mayor, los observé como si fueran mis hij…

- No te atrevas a decirlo- gruñó Kay.

- Bien- suspiró el hombre con el rostro quemado- Cómo les decía: todo fue orquestado por mí.

<< Cuando tomé el cuerpo de Minos Jimonte y conocí al sacerdote Meddes, mi vida dio un giro compulsivo. Supe que había seres elegidos especialmente para salvar al mundo y deduje que su muerte tenía que ser parte del plan maestro que lograría reconstituir todo lo que conocemos. Meddes creía que había un solo JEN llamado Frank Montarnen. Me contacté con el PRODIGIUM y establecimos un pacto. Antes de esto, casualmente me había cruzado con uno de los viejos elementales llamado José Morgán, al cual poseí con mi marca negra. Fue algo que no le dije a Meddes al principio, yo aproveché esta casualidad para que asesinara al JEN. 

Lo que yo desconocía era que Morgán quería a Frank como un hijo y debido a ese amor, la marca negra no hizo efecto del todo; Morgán le encomendó está misión a Manuel Curtansen, antes de llamarse Dimitrion. Frank y su familia murieron- Kay apretó los dientes- Pero el PRODIGIUM rechazó entrar a la Tierra y me dijo que el JEN seguía con vida. Por descarte, pasamos a su amigo. Costó contactar a Nicholas Dameron, tuvimos que expandir nuestras redes y constituir la Cruz, la organización criminal de Ryanos contra la sociedad de los humanos. Ellos lo encontraron años después e hicieron el trabajo- Sony apretó los dientes- Pero el PRODIGIUM insistió en que los JEN continuaban existiendo. Meddes y yo viajamos a la Tierra de incógnito para corregir aquel error, estábamos perdidos, y tardamos años en descubrir que ustedes dos eran los elegidos. Para cuando lo hicimos, yo reconocí a mi hermano Pedro y mi misión volvió a dar otro giro inesperado, él era su protector.

Cómo sabrán, seduje a los Ryanos del Mundo Helado para que cruzaran el portal, haciéndome pasar por su dios Ázu, también les borré la memoria temporalmente. Yo conozco a los humanos y sabía que los rechazarían por sus diferencias. Las cosas no fueron como yo creí y ambas especies convivieron en una “armonía fingida”. Sus padres- Hariet lanzó una risita- Sí que eran dos problemas para mí. Cuando ni siquiera había ordenado la ejecución de estos, ellos se reunieron con el Rey de la G.N.U.M con el objetivo de proponer su protección y de establecer mayor equidad entre las especies. Lo que fue conocido como el Proyecto Light. No podía dejar que eso pasara, yo siempre quise que los Ryanos experimentaran verdadero ODIO hacia los humanos y los destruyeran por dentro.

Fue entonces cuando opté por un plan complejo y efectivo, tan minucioso que terminaría en este momento con nosotros tres hablando.

Estudié la historia que me había perdido, el aspecto de la nueva era y así, algo se me ocurrió. Para conquistar necesitaba dividir y la G.N.U.M era un potente oponente con ejército y armamento. Fueron años hasta la aparición de Van Robin Hed, mal visto como un vigilante enmascarado, me aproveché de ello y mandé a mis espías a Estados Unidos, quienes querían recuperar su antigua gloria, y ellos mismos ayudaron a componer una escuela de militares (lo que aprendí del pasado) para generar golpes de estado en cada país de la G.N.U.M y desestabilizar la organización. ¿Y cómo hice para convencer a cada jefe militar de que hiciera semejante traición a su estado? Fácil, la escuela les enseñó que Van Robin Hed era una amenaza pública que nunca sería controlada por la G.N.U.M y que se necesitaba un control estricto, un control militar…

De este modo, la crueldad militar haría que los Ryanos volvieran a desconfiar de los humanos y provocaría otra guerra civil, donde ellos se pondrían de mi lado cuando yo llegara.

Y ustedes… de ustedes necesitaba otras cosas más específicas y sobrenaturales.

Había dos cosas que tenían que ser eliminadas para antes de que yo recuperara mi verdadero cuerpo: la espada divina y la isla flotante de Sarmander.

Morgán buscó la primera y Dimitrion la segunda, bajo mis órdenes.

Sony, tú conociste la verdad en el 2225 y ustedes dos volvieron a reunirse. Dimitrion tenía estrictas órdenes de llevarlos a la Isla y de resucitar a los Narsogs con ustedes presentes. La muerte de la única mujer elemental fue un agregado que no me esperaba y que luego aproveché.

Yo quería que destruyeran la Isla Sarmander en la batalla, pero no fue así. Debido a que Morgán me había contado la magia que me impedía pisarla, como único refugio para ustedes.

Dimitrion falleció y los Narsogs no regresaron, pero ustedes se hicieron más fuertes. Me sentí orgulloso de su avance- Kay y Sony se miraron con rareza- Después del año 2225, llegó el 2226 y opté por que conozcan la búsqueda de Morgán. El Redentor había encontrado un viejo pergamino con una advertencia sobre mí y un mensaje confuso. Él cortó el pergamino, escribió sus iniciales M.M y dejó un trazo en un pequeño pozo de tierra, en la Isla flotante. Ya contaré que pasó con el otro pedazo del pergamino.

Yo sabía que se pondrían a buscar la espada divina por temores de mi hermano, y que la encontrarían antes que nosotros. Morgán logró resucitar a los Narsogs y destruir Sarmander, sin embargo, su verdadera misión era destruir la espada, pero su portador lo hizo por él. Sin espada divina ni isla flotante, era hora de pasar al siguiente nivel.

Era el año 2227 y persuadí al sacerdote Meddes para que llevara la otra parte del viejo pergamino, junto al medallón de bronce en una antigua casa. Siendo reencarnaciones del titán, sabía que se sentirían atraídos hacia su poder, sin saberlo. Así fue. Meddes les agregó las palabras correctas para que viajaran a la otra dimensión: APEN ZEN.

Nos reencontramos, ustedes y yo en un cuerpo ajeno. Dayas los rescató como predije y se unieron a la resistencia.

Deben creer que soy un egocéntrico, pero no. Deduje que Pedro y ustedes le revelarían la verdad a Dayas tarde o temprano y así, el príncipe despertaría su verdadero potencial.

A los Kiceanos les seguí el juego del trono, de mi sobrino, de la resistencia; para que ustedes buscaran los artefactos dorados (dos de ellos los oculté estratégicamente cerca del Templo de Jimonte) y lo visitaran. Para que supieran que yo estaba vivo y para que se quedaran con el cubo mágico. Yo no podía entrar a ese Templo porque no tenía el poder para enfrentar a la estatua de oro, por eso los necesitaba.  

Cuando todo estuvo orquestado, ataqué la guarida de los Kices y ustedes huyeron, como imaginé. Y volvieron al Reino para evitar las muertes de los Kiceanos, como también anticipé. Son obvios, jóvenes JEN.

Me trajeron el cubo que abrió la caja con mi verdadero cuerpo y Dayas se convirtió en el águila dorada, liberándome de Minos y llevándome a este cuerpo, al de Hariet, el Único.

Todo iba perfecto, casi soñado. No obstante, el PRODIGIUM me advirtió de las bestias demoníacas de los JEN y de la búsqueda de Vrogh a través de sus acólitos: La Luz Oscura. Ya lo sabía por Meddes, pero fue bueno recordarlo.

Era el año 2228 y había llegado la hora, Meddes “encontró” a los JEN y las bestias despertaron. Tenían que llegar al Templo de la Muerte cuanto antes o serían absorbidos por sus alter-egos. Meddes vigilaba a Fismut y sabía que este lo estaba siguiendo, gracias a eso, supimos que Fismut los ayudaría a llegar al Templo a través de los tres planetas y los fragmentos de la llave.

Una vez ustedes llegaron al Templo, destruí a los últimos titanes del cosmos, la verdadera amenaza y purifiqué sus respectivas razas- Kay y Sony no hicieron gesto en absoluto- Finalmente, ustedes obtuvieron el TORQUEM y Meddes se los robó cuando tuvo oportunidad, me lo dio a mí. Ya estaba todo listo.

Sin embargo, el PRODIGIUM es muy poderoso y necesito poder controlarlo. Algo que no sabía que existía hasta hoy, algo que yace en esta Fortaleza…>>

- El medallón de plata- dijo Kay con seriedad.

- No. La armadura de Büul- los JEN volvieron a quedarse mudos- Él planeaba controlar el PRODIGIUM, como yo, y forjó una armadura especial para portar el TORQUEM, la cual nunca llegó a utilizar. Está aquí… en alguna parte.

- ¿Cómo supiste que nosotros éramos los verdaderos JEN? – le preguntó Sony con frialdad. Hariet lo miró.

- El PRODIGIUM me lo dijo. ¿Por qué?

Sony se quedó callado. A Hariet no le importó y siguió hablando.

- Con el medallón de bronce armé un ejército de diferentes mundos para invadir la Tierra y enfrentarlos en combate. Con el medallón de oro desaparecido y el de bronce bajo mi poder, deduje que Fismut optaría por encomendarles la misión de encontrar el medallón de plata para revivir a los viejos elementales- volvió a reír- Estoy seguro de que fue así. Pero nadie sabía dónde estaba. Hasta que Hélen, mi subordinada, escuchó rumores de que Dayas Jimonte había vuelto herido al Oszen de una tierra extraña. Dejé que las cosas sucedieran y se acomodaran; Hélen los siguió y descubrió este lugar, ocultado por Gargas durante siglos. El Intocable me contó de la armadura de Büul para expiar sus pecados del pasado, porque como ya sabrán, él me traicionó hace muchos años. Así concluye todo, en este lugar, donde ustedes, las reencarnaciones del titán creador, morirán.

Kay dio un paso al frente.

- ¿Sabes? En otra época y en otras circunstancias, podríamos haber sido amigos- Sony miró a Kay con orgullo. Sus togas blancas se iluminaron por los círculos (rojo y azul) de los magos. Hariet también se sorprendió y sonrío con picardía- Estás mal, Único. Asesinar a los que te parezcan “innecesarios” no te hace ser un héroe ni un salvador. No eres el elegido, Hariet, supéralo. No viniste a “reconstruir la sociedad”, viniste a imponer tus pensamientos a la fuerza y a purgar a la humanidad para luego seleccionar y resucitar a los que te convengan- Kay se puso en guardia- Podrás parecerte todo lo que quieras, pero él era nuestro mentor, nuestro amigo, nuestro guía; y tú… ¡TU SÓLO ERES UN BASTARDO!

La expresión de Hariet cambió por completo.

Sony y Kay utilizaron las fuerzas magnéticas para atacarlo, Hariet saltó y esquivó los ataques que destruyeron unos cuantos escalones.

El Oscuro cayó a metros de los JEN, intercambiaron miradas desafiantes, la batalla final había comenzado.

- Podrían haber muerto de la manera fácil y sin dolor- vociferó Hariet- Pero si su deseo es luchar…

Hariet conformó la bola de energía de rayos negros y blancos, aquella que Kay y Sony recordaban muy bien. La lanzó y los JEN hicieron algo que dejó a Hariet anonadado; envolvieron el proyectil con las fuerzas magnéticas, moviendo sus manos al mismo tiempo, y la llevaron hasta arriba, donde atravesó el techo de Iglesia y explotó en los cielos.

Ambos se sentían débiles luego de ello, la bola también absorbía energía. No obstante, los círculos de los magos habían quedado dibujados en los suelos, sin moverse, algo también inusual para Hariet. Los JEN regresaron a ellos y de cierta forma, cargaron nuevas energías.

- Impresionante- dijo el antagonista- Muy impresionante, nunca dejan de sorprenderme.

A continuación, Hariet manipuló la materia de las barandas y las paredes para tirarles objetos y convertirlos en líquido y gas. Kay usó la súper velocidad y atacó a Hariet cuerpo a cuerpo, ambos empezaron a batirse en un duelo marcial. Sony, por su parte, se envolvió a sí mismo con un caparazón de cristal (lava solidificada) que lo protegió de los ataques.

Hariet no podía entender como seguían luchando después de la muerte de sus amigos y de batallar contra miles de soldados entrenados. Estaba sorprendido y un poco desorientado…

Kay insistía con patadas y puños rodeados de fuego, pero Hariet lo tomó de la cabeza y lo comenzó a exprimir como a una naranja. Sony fue en su ayuda y cuando estuvo a punto de darle un puñetazo de súper fuerza en la espalda, Hariet lo tomó con su otra mano. Ambas manos del villano se habían expandido y su altura también había crecido. Los JEN dedujeron que Hariet había aprendido a manipular la habilidad que también tenía Büul: controlar la masa de su cuerpo.

En ese momento, recordaron algo. Sony formó una “X” con sus brazos y una luz azul surgió, esta se deslizó como una serpiente hasta la sombra de Kay, la cual cobró vida propia y tomó la luz con sus manos (esta se convirtió en una lanza). Así, un guerrero sin rostro atacó a Hariet por la espalda. Hariet gimió del dolor y los soltó, los JEN escaparon.

El Único tomó a la sombra sólida de la cintura y la exprimió hasta que se deshizo.

- Cuántos nuevos trucos- jadeó.

- ¿Por qué no usa todos sus poderes? – le susurró Kay a Sony.

- Porque no quiere destruir la Fortaleza, teme perder lo que busca- le contestó su compañero. Fue entonces cuando a Kay se le encendió la lamparita.

- ¡Dejen de cuchichear y terminemos con esto! – vociferó el Único y desenvainó su espada con forma de calavera.

Kay revoleó los brazos y arrasó la superficie de las columnas y paredes, provocando un desastre inminente. Los cristales sonaron y los escombros cayeron al suelo.

Hariet apretó los dientes e intentó atacar a Kay, pero este se le adelantó y usó la súper velocidad para burlarse de él, pasarlo de largo e ir hasta las escaleras del trono. Luego, empleó gigantescas bolas de fuego.

Hariet quiso evitarlo, pero Sony aprovechó su desconcierto para atarles los antebrazos y las piernas con unas sogas mágicas de color verde. Ambos forcejearon, uno para salir, el otro para que no avance.

Fue demasiado tarde, los escalones se pulverizaron y Kay ocasionó un gran hoyo en las enormes escaleras. Si no podían vencerlo, al menos tenían que retrasarlo o detener su objetivo.

Sin embargo, se dio todo lo contrario. El hoyo perforado tenía rastros de una habitación oculta. Todos se sobresaltaron y se quedaron boquiabiertos.

Hariet movió el brazo y Sony se arrastró por el suelo con las sogas que lo sujetaban, no tuvo mayor remedio que soltarlo.

Kay se había quedado mirando la abertura con sumo interés. Hariet lo golpeó con el brazo para echarlo a un lado; luego manipuló los fragmentos de las escaleras que aún le impedían el paso y usó sus habilidades para transformarlos en líquidos.

El pasadizo secreto comenzaba con una escalera que descendía hacia lo subterráneo, Hariet entró en la oscuridad. Los JEN lo siguieron después de lanzarse miradas.

No duraba mucho la escalera, abajo había una sala de tierra, sucia y antigua. Las paredes estaban dibujadas y todas ellas conformaban una circunferencia con treinta metros de diámetro; las antorchas se encendieron solas cuando los tres personajes arribaron aquel lugar.

El techo era bastante bajo, dos metros por encima de la cabeza de Hariet. No había nada más, sólo las antorchas colgadas por cada “cuadro” dibujado en la pared, tierra y bichos.

Kay y Sony apretaron los dientes y se quedaron muy cerca de la puerta, de donde provenía mucha de la luz. Hariet avanzó hacia los murales y los acarició.

- Es su historia- dijo en voz alta para sí mismo.

Por un segundo, los JEN pensaron en cerrar la puerta y dejar a Hariet encerrado allí o de derrumbar el lugar con el Único adentro, pero no podían, su misión era clara e inconfundible.

Las botas oscuras de Hariet eran lo único que se oía en aquel misterioso sector, él caminaba mientras arrastraba su mano metálica por los murales y las interpretaba en voz alta.

La que parecía ser la primera imagen que daba inicio al ciclo tenía a un gigante mal dibujado atacando a muchas personas e incendiando sus hogares. Eran veinte imágenes en total.

- El titán Vrogh arrasó con su pueblo- empezó Hariet con cierto aire de misterio en la voz- Él fue el único sobreviviente y juró venganza por la muerte de su familia- iba por el segundo dibujo dónde un hombre gritaba en medio de un mar de cadáveres, en el tercero había un templo y el gigante entraba a él- Sin embargo, Vrogh volvió a encerrarse en el Templo de la Muerte- el cuarto y el quinto mostraban a un hombre entrenando frente a una esencia fantasmagórica- Se entrenó y buscó la manera de hacer justicia. Se llamó a sí mismo Büul, el Caído e hizo un pacto con el PRODIGIUM- la sexta tenía a la esencia y a unos seres extraños que parecían parásitos humanoides- El PRODIGIUM le otorgó a los AGENTES DEL CAOS, sin embargo…- Hariet se posó un segundo en la séptima y octava imagen, las cuales conformaban un único mural con cinco personajes: Dos hombres de cabello blanco, una mujer, un hombre de cabello violeta y un esqueleto- Se le opusieron, derrotando a los pocos agentes, y al mismo tiempo, encontró a los indicados para arrebatarles sus poderes, los Proetas- Kay y Sony prestaron atención al noveno mural, era la misma imagen más pequeña y con un círculo en Fismut y Gyan- Enfocó su atención en sólo dos e intentó derrotarlos- Hariet caminó hacia el décimo cuadro, donde un ejército de monstruos se alzaba en un bosque- Lo intentó creando a los Narsogs- el onceavo y el doceavo cuadro mostraban a Büul luchando con los hermanos de cabello blanco- Hubo una batalla final- en el treceavo Gyan encerraba a los Narsogs en un ritual- Dónde Gyan los encerró en el ritual de los malditos, el mismo que usaron los primeros elementales para derrotar a mi ejército durante la batalla de Ondárroa. Y…- el catorceavo y quinceavo estaban pintados con negro. Recién el dieciseisavo tenía el dibujo de la Fortaleza desde afuera- Hasta aquí supo Gargas. Interpreto que Büul y Gyan murieron y el Intocable se encargó de su hogar- el diecisieteavo y el dieciochoavo plasmaban la imagen de Gargas frente al medallón de plata y la armadura que Hariet deseaba. En el diecinueveavo, Gargas usaba el medallón de plata y a su lado había un cadáver con una armadura oscura. En el número veinte, Büul volvía a aparecer y estaba escrita la frase: EL VERDADERO- Quiere matarme para resucitarlo, curioso. Él cree que yo soy un…

- Impostor- se adelantó Sony y todo tembló. Una plataforma surgió en el centro del interior de la tierra, era cuadrada y tenía un gran vidrio transparente cubriéndola. Los JEN se acercaron, Hariet tenía la boca abierta. Era la armadura de Büul, plateada y reluciente como si no llevara siglos allí, vestida por un maniquí. Y a su lado, un pequeño estante portaba un artefacto redondo, con insignias a su alrededor: el medallón de plata.     

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